Cd. de México (agencias).- La luz azul que emiten las pantallas de computadoras, celulares, tabletas y televisiones no solo ocasiona problemas de obesidad y psicológicos, un nuevo estudio demostró que acelera el envejecimiento. Aquí todos los detalles.
Para realizar el estudio utilizaron moscas de fruta y de acuerdo a los resultados, las funciones celulares básicas podrían verse afectadas por la luz azul que emiten las pantallas de los dispositivos.
Según la doctora Jadwiga Giebultowicz, profesora del Departamento de Biología Integrativa de la Universidad Estatal de Oregon, Estados Unidos, y autora principal del estudio, la exposición excesiva a la luz de los dispositivos cotidianos, tienen un efecto perjudicial en una amplia gama de células de nuestro cuerpo.
“Exponerse a la luz azul de los dispositivos puede tener efectos perjudiciales en una amplia gama de células de nuestro cuerpo, desde células de la piel y de la grasa hasta las neuronas sensoriales”, mencionó la doctora.
“Somos los primeros en demostrar que los niveles de metabolitos específicos (sustancias químicas esenciales para el correcto funcionamiento de las células) se alteran en las moscas de la fruta expuestas a la luz azul”, dijo.
Jadwiga Giebultowicz enfatizó que el estudio recomienda evitar la exposición excesiva a la luz azul puede ser una gran estrategia antienvejecimiento.
Anteriormente, los investigadores de la Universidad Estatal de Oregon ya habían notado que las moscas de fruta expuestas a la luz “encendían” los genes protectores del estrés.
También llegaron a la conclusión que las moscas de fruta que permanecen en la oscuridad viven más tiempo.
Para realizar el estudio, hicieron un comparativo entre los niveles metabolitos en las moscas expuestas a la luz azul durante semanas y las que permanecieron en la oscuridad.
Con este comparativo lograron entender cómo es que la luz azul de alta energía causa el aceleramiento del envejecimiento. En el estudio descubrieron que los niveles del metabolito succinato aumentaron y los de glutamato disminuyeron.
“Las sustancias químicas de señalización en las células de las moscas y de los humanos son las mismas, por lo que existe la posibilidad de que la luz azul tenga efectos negativos en los humanos”, explicó la doctora.
Finalmente, los investigadores esperan poder estudiar los efectos de la luz azul en las células humanas.
“Utilizamos una luz azul bastante intensa en las moscas. Los humanos están expuestos a una luz menos intensa, por lo que el daño celular puede ser menos negativo”, aseguró Giebultowicz.
Con información de Dinero en Imagen | JM | Foto: iStock
